lunes, 28 de abril de 2008

Desde otro punto de vista

Un escorpión, que deseaba atravesar el río, le dijo a una rana:
-Llévame a tu espalda.
-¡¿Que te lleve a mi espalda?! -contestó la rana- ¡Ni pensarlo! ¡Te conozco! Si te llevo a mi espalda, me picarás y me matarás.
-No seas estúpida -le dijo entonces el escorpión- ¿No ves que si te pico te hundirás en el agua y que yo, como no sé nadar, también me ahogaré?
Los dos animales siguieron discutiendo hasta que la rana fue persuadida.Lo cargó sobre su resbaladiza espalda, donde él se agarró y empezaron la travesía.
Llegados al medio del gran río, allí donde se crean los remolinos, de repente el escorpión picó a la rana. Ésta sintió que el veneno mortal se extendía por su cuerpo y, mientras se ahogaba, y con ella el escorpión, le gritó:
-¡Ves! ¡Te lo había dicho! Pero, ¿qué has hecho?
-No puedo evitarlo- contestó el escorpión antes de desaparecer en las aguas- Es mi naturaleza.

2 comentarios:

Guillermo Barquero dijo...

La naturaleza de los seres es un abismo en que otro, de una especie lejana, termina cayendo sin remedio posible. Este post no se trata de darwinismo innegable solamente, sino de trampas en que se cae y de las que escapar es peligroso.

T dijo...

Gracias por pasar, creo que la naturaleza de los seres
se conoce a traves de sus acciones.....
el verdadero caracter se demuestra a traves de los hechos
Las trampas muchas veces son inventos de nosotros mismos o imposiciones deliberadas de otros ,los humanos somos grandes constructores de trampas , la genialidad es verlas venir antes de caer en ellas pero eso solo los descorazonados...... yo estoy esperando, ahora que esta de moda que me llegue el manual. jejeje pero bueno sentenciero como diria parfait "No aparece el hombre entregado al movimiento del mundo sino es de tanto en tanto juguete del destino "saludos

La maquina .