domingo, 8 de junio de 2008

You don't know what you've got till it's gone












Ordené que trajeran mi caballo del establo. El sirviente no entendió mis órdenes. Así que fui al establo yo mismo, le puse silla a mi caballo y lo monté. A la distancia escuché el sonido de una trompeta y le pregunté al sirviente qué significaba. Él no sabía nada ni escuchó nada. En el portal me detuvo y preguntó:

-¿Adónde va el patrón?
-No lo sé -le dije- simplemente fuera de aquí, simplemente fuera de aquí. Fuera de aquí, nada más, es la única manera en que puedo alcanzar mi meta.
-¿Así que usted conoce su meta? -preguntó.
-Sí -repliqué- te lo acabo de decir. Fuera de aquí, esa es mi meta.

3 comentarios:

Guillermo Barquero dijo...

Evidentemente se trata de un post melancólico sobre la partida y el recuerdo que ésta deja. Esa estela no solo se convierte en recuerdos que el que parte añora y lamenta, sino que es un rastro para los que se quedan, que a partir de eso fundarán sociedades con el auxilio del recuerdo de los que se fueron. Grandes sociedades, para ser claros.
Saludos.

Anónimo dijo...

Claro sentenciero "we are the world", gracias por pasar dos contactos en un mismo dia es un milagro, saludos de nuevo.

Patricia Miranda dijo...

Fuera de aqui! Kafka acertado! y la foto es una pasada! me encanta! espero que este post nada tenga que ver con una despedida! o si? a donde vas maquina? fuera de alli? besos